domingo, 8 de julio de 2012

CAPÍTULO 29.


Prestar
(Dt 15,1-11)

29 1Quien presta al prójimo hace obra de misericordia
quien le echa una mano guarda los mandamientos.
2Presta a tu prójimo cuando lo necesita,
y paga pronto lo que debes al prójimo
3cumple la palabra y séle fiel,
y en todo momento obtendrás lo que necesitas.
4Muchos tomaron un préstamo como un hallazgo
y perjudicaron al que les prestó:
5hasta conseguirlo le besan las manos,
ante las riquezas del prójimo humillan la voz;
a la hora de devolver dan largas
y piden una prórroga.
6Importunando apenas recobrará la mitad,
y lo considerará un hallazgo;
en otro caso se quedará sin dinero
y se habrá echado un enemigo de balde,
que le pagará con maldiciones e insultos,
con injurias, en vez de honor.
7Muchos se retraen no por maldad,
sino temiendo que los despojen sin razón.
8con todo, ten paciencia con el pobre
y no le des largas en la limosna;
9por amor a la Ley recibe al menesteroso,
y en su indigencia no lo despidas de vacío;
10pierde tu dinero por el hermano y el prójimo,
no dejes que se oxide bajo una piedra;
11 invierte tu tesoro según el mandato del Altísimo,
y te producirá más que el oro;
12guarda limosnas en tu despensa,
y ellas te librarán de todo mal;
13mejor que escudo resistente o poderosa lanza,
lucharán contra el enemigo a tu favor.

Fianza
(Prov 6,1-5)

14EI hombre bueno sale fiador por su prójimo,
el que no tiene vergüenza lo abandona;
15no olvides el favor del que fió por ti,
pues se expuso por tu causa;
16quien disipa los bienes del fiador es un pecador,
quien abandona a su salvador es un desagradecido.
17La fianza ha arruinado a muchos ricos
y los ha sacudido como a olas del mar;
18dejó sin casa a hombres adinerados,
que tuvieron que emigrar al extranjero.
19EI pecador que cayó en fianza por afán de lucro
se enredará en pleitos.
20Ayuda a tu prójimo según tus posibilidades,
pero ten cuidado de no arruinarte.

En casa ajena
(EcIo 40,28-30)

21Son esenciales para la vida agua y pan y casa
y vestido para cubrir la desnudez.
22Más vale vida pobre al reparo del propio techo
que banquete en casa ajena;
23conténtate con lo que tienes, poco o mucho,
y no oirás las burlas de la vecindad.
24Es vida dura ir de casa en casa,
donde eres forastero no abrirás la boca;
25recibirás abochornado hospedaje y bebida,
y encima tendrás que oír frases hirientes:
26«Anda, forastero, prepara la mesa,
dame de comer lo que tengas»;
27«Vete, forastero, que viene gente importante,
llega mi hermano a hospedarse y necesito la casa».
28Duro es esto para el hombre sensato:
injurias del casero, burlas del prestamista.

29,1-13 En dieciséis versos nos ofrece Ben Sira un comentario al precepto de Dt 15,7-8. Expone la cuestión moral con la autoridad de un maestro que sabe reconocer la razón contraria y vencerla con razones superiores. Describe con ironía y aconseja prometiendo. Justifica la desconfianza de muchos, y por ello exhorta a la puntualidad en devolver: dos aspectos correlativos en la práctica social del prestar.

29,1 Alude expresamente al mandamiento como tema de su lección. Véase también Sal 37,26; 112,5.

29,2 El primer verso enuncia los dos aspectos complementarios de la cuestión: Dt 15 sólo hablaba del primer aspecto.

29,3 La motivación de la segunda parte es, por ahora, interesada.

29,4 La forma "muchos" introduce una objeción, del alumno o del profesor mismo. El texto del primer hemistiquio es dudoso.

29,5-6 En buen estilo sapiencial describe un tipo humano; la simple presentación literaria tiene valor didáctico. Un refrán castellano dice: "Quien dineros quiere cobrar, muchas vueltas ha de dar". Véase la implicación de Jer 15,10.

29,7 En inclusión resume la dificultad honestamente y mostrando comprensión.

29,8-9 Responde levantándose a una instancia superior, tal como lo prevé la citada ley del Deuteronomio. La motivación es "por amor a la ley'; en el NT, será por amor a Cristo presente en sus hermanos. Véase la legislación: Ex 22,25.27; Lv 25,35-38; Dt 23,19-20.

29,10-13 En la motivación pasa sin sentirlo del préstamo a la limosna: prestar a fondo perdido es la inversión más rentable. Sobre la limosna véase: Prov 10,2; 11,4; 28,27. Cristo dirá la palabra definitiva sobre el tema: Mt 19,21; Mc 10, 21; Lc 18, 22,

29,14-19 La doctrina sobre la fianza es aquí más positiva que en 6,1ss o 17,18ss, y más que en Prov 6,1-5; quizás debido a un cambio en la estructura económica. Pero no desaparece del todo el aspecto negativo. Un refrán castellano dice "Quien fía o promete en deuda se mete". Como los vv. 2,14-15 exponen los dos aspectos de la fianza, generosidad y agradecimiento; los vv. 17-18 equivalen a una dificultad, como los. vv. 4-7: por culpa del injusto e ingrato la gente no se fía. El v. 19 añade otro aspecto: "por afán de lucro"; subraya cómo al principio se trataba de caridad desinteresada.

29,20 Sirve de colofón a las dos secciones precedentes, prestar y fiar, en sus dos aspectos.

29,21-26 El tema se relaciona con lo anterior. Compárese con 40,28-30 "Vivir de limosna".

29,21 Véase 39,26.

29,23 Sobre el contentarse: Sal 131 (en un sentido amplio); Mt 6,25; Lc 12,22; 1 Tim 6,6-8.

29,24 Véase 36,31; Lc 10,7.

29,25-28 El texto es muy dudoso. Se trata de frases hirientes, quizás "deja libre la mesa, deja tu porción a otros". Tenemos que colocar este texto en el régimen de la hospitalidad oriental, en este caso mal observada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario